Óscar, el gato que predice la muerte ya tiene libro

Madrid.- Óscar, un gato de pelaje blanco y gris que vive en un geriátrico de Rhode Island (EE.UU.), es el protagonista de un libro muy especial. 'De guardia con Óscar' relata la historia de este felino nada común, capaz de 'oler' la muerte y predecir cuando alguien va a fallecer.

La peculiar historia de Óscar comienza cuando los responsables de la residencia de ancianos Steere House lo adoptaron siendo cachorro. Desde su llegada al centro de mayores Óscar manifestó una preferencia por acurrucarse siempre al lado de pacientes que estaban a punto de morir. Cada vez que el animal visitaba una de las habitaciones, su ocupante fallecía a las pocas horas.

Desde su llegada al centro de mayores, Óscar ha predicho con exactitud más de 50 muertes. La primera visitada por el felino fue Marion McCullough, quien murió tranquila al lado del animal. Desde entonces, lejos de signo de mal fario, Óscar ha servido de fiel velador de pacientes que se encuentran cerca de la muerte.

Ahora, en 'De guardia con Óscar', uno de los médicos del geriátrico, David Dosa, analiza la historia y las peculiares habilidades de este gato, apodado como 'el ángel de la muerte' por los ancianos de la residencia. Sin embargo, su cualidad, lejos de ser achacable a poderes paranormales, podría tener una explicación científica. Cuando las células dejan de trabajar se entra en un estado de inanición que puede desprender olor a cetonas. Según el doctor Dosa, Óscar podría olfatear cualquier sustancia orgánica que el cuerpo humano arroja cuando sus células empiezan a morir.

A pesar de la fama del felino, que se ha convertido en uno de los personajes más buscados por Internet, el autor del libro asegura que "no cree que el estrellato lo haya afectado en modo alguno". "Sigue actuando como siempre", sostiene Dosa.

El autor de 'De guardia con Óscar' asegura que su libro no es una investigación científica ni trata de buscar explicación al fenómeno, sino que cuenta los lectores la vida en una residencia de ancianos.