Pareja homosexual argentina registra bebé como su hijo
Un bebé fue inscrito por primera vez en Argentina como hijo de dos mujeres, luego de que el país se convirtiera en el primero de Latinoamérica en aplicar una reforma legal que habilita el matrimonio homosexual, informaron hoy a Efe allegados a la pareja.
Verónica F. y Cecilia M., ambas de 35 años, que el pasado 11 de agosto se casaron en la capital argentina, anotaron este miércoles al recién nacido, Vicente, en el Registro Civil de Buenos Aires.
“Significa un gran avance en la adquisición de derechos ciudadanos y en el inicio de un camino que zanja diferencias entre las familias formadas por parejas homosexuales y el resto de las familias”, sostuvo a Efe Florencia Gemetro, dirigente de la organización Lesmadres, que asesoró a las mujeres.
Gemetro indicó que las autoridades del Registro Civil anotaron a Vicente como hijo de ambas pero no permitieron que el bebé lleve los dos apellidos, sino sólo el de la madre biológica del pequeño, nacido como resultado de un tratamiento de inseminación artificial.
La ley de matrimonio homosexual, sin embargo, que habilita la adopción de niños por parte de parejas gays, “es bastante clara y permite anotar a los hijos con el apellido de ambas”, lamentó la dirigente de la organización, una de las tres entidades que asesoraron a la pareja.
Gemetro anticipó además que otras parejas homosexuales también esperan en los próximos días anotar a sus hijos.
“Necesitábamos poder inscribirlo, por ejemplo, para sumarlo a la obra social. Ahora podemos pasar los tres al plan familiar: inscribirlo a él, unir nosotras nuestros aportes” al sistema de salud, explicó Verónica al diario Página/12, en las únicas declaraciones que brindó la pareja.
“En un mes nos encontramos con que estamos casadas, con el nene anotado en la libreta de matrimonio y a nombre de las dos”, reflexionó Verónica.
Argentina se convirtió en julio pasado en el primer país latinoamericano en autorizar el matrimonio homosexual, tras un reñido debate en el Senado que se prolongó durante casi 15 horas y que reflejó la profunda división política y social que vivió el país al calor de esta iniciativa.
Hasta ese momento, sólo cuatro ciudades argentinas admitían la unión civil entre personas del mismo sexo, aunque desde diciembre al menos ocho parejas homosexuales se habían casado en el país mediante habilitaciones judiciales.
Verónica F. y Cecilia M., ambas de 35 años, que el pasado 11 de agosto se casaron en la capital argentina, anotaron este miércoles al recién nacido, Vicente, en el Registro Civil de Buenos Aires.
“Significa un gran avance en la adquisición de derechos ciudadanos y en el inicio de un camino que zanja diferencias entre las familias formadas por parejas homosexuales y el resto de las familias”, sostuvo a Efe Florencia Gemetro, dirigente de la organización Lesmadres, que asesoró a las mujeres.
Gemetro indicó que las autoridades del Registro Civil anotaron a Vicente como hijo de ambas pero no permitieron que el bebé lleve los dos apellidos, sino sólo el de la madre biológica del pequeño, nacido como resultado de un tratamiento de inseminación artificial.
La ley de matrimonio homosexual, sin embargo, que habilita la adopción de niños por parte de parejas gays, “es bastante clara y permite anotar a los hijos con el apellido de ambas”, lamentó la dirigente de la organización, una de las tres entidades que asesoraron a la pareja.
Gemetro anticipó además que otras parejas homosexuales también esperan en los próximos días anotar a sus hijos.
“Necesitábamos poder inscribirlo, por ejemplo, para sumarlo a la obra social. Ahora podemos pasar los tres al plan familiar: inscribirlo a él, unir nosotras nuestros aportes” al sistema de salud, explicó Verónica al diario Página/12, en las únicas declaraciones que brindó la pareja.
“En un mes nos encontramos con que estamos casadas, con el nene anotado en la libreta de matrimonio y a nombre de las dos”, reflexionó Verónica.
Argentina se convirtió en julio pasado en el primer país latinoamericano en autorizar el matrimonio homosexual, tras un reñido debate en el Senado que se prolongó durante casi 15 horas y que reflejó la profunda división política y social que vivió el país al calor de esta iniciativa.
Hasta ese momento, sólo cuatro ciudades argentinas admitían la unión civil entre personas del mismo sexo, aunque desde diciembre al menos ocho parejas homosexuales se habían casado en el país mediante habilitaciones judiciales.
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