Los jefes arruinan la productividad de sus equipos

No sucede siempre, ni con todos los ejecutivos, por supuesto.

Pero a veces un jefe, con las mejores intenciones, degrada poco a poco la productividad de todos y cada uno de los miembros de su equipo. Volviéndolos menos eficientes, menos efectivos, y menos enfocados en lo que realmente importa en el trabajo: LOS RESULTADOS.

Pero, ¿cómo sucede esto?

Bueno, la razón esencial es sencilla.

Imagínate que trabajas duro cada día por tu empresa. Pero tu colega, Mario, se la pasa vagando. Lo ves vagar cada vez que pasas cerca de su puesto, y sabes que sus resultados no son ni una cuarta parte de los tuyos... Pero a todo el equipo se le mide una sola estadística: "Ventas semanales", o "Productos fabricados". Entonces a Mario le pagan lo mismo que a ti.

Y luego, cuando llega la hora de ascender a alguien a jefe de división, resulta que Mario ha salido varias veces a jugar golf con el jefe, mientras tú te quedabas trabajando tiempo extra... Así que, por supuesto, ascienden a Mario.

¿Sientes cómo todas tus ganas de trabajar duro se van al trasto?

“Las personas productivas no están concentradas en los salarios y el estatus: están concentradas en lo que producen. Sin embargo, eso no significa que no se den cuenta cuando hay injusticia (y ni siquiera tiene que ser contra ellos mismos). Y la injusticia es de las pocas cosas que nadie que sea realmente productivo se va a aguantar: O su productividad se desplomará, o se irá de tu empresa directamente.” Comentó Jairo Pinilla, director ejecutivo de Performia Colombia, y autor del Manual del Ejecutivo.

Pero aquí está el detalle: ¡TU ATENCIÓN ES COMO TU DINERO!

Tu atención es tu moneda más valiosa, especialmente cuando se trata de las personas que te conocen o te respetan.

“Los hijos problemáticos que odian a sus padres, o que tienen complejos psicológicos relacionados con ellos, no lo hacen porque sus padres no les dieron suficiente dinero, sino porque no les dieron suficiente atención.

El comentario político odioso e inflamatorio dejado anónimamente en internet no fue hecho por alguien que quería dinero, sino por alguien que quería atención. Los famosos que se enloquecen cuando su fama se acaba y comienzan a hacer locuras, lo hacen para atraer la atención pública, no para ganar más dinero. Incluso los perpetradores de los desafortunados tiroteos escolares, que se han vuelto tristemente tan comunes en Estados Unidos, admiten a menudo que su intención principal es salir en las noticias.” Añadió Pinilla.

La atención de los demás es valiosísima para los seres humanos. Está en nuestra naturaleza básica. Y tu atención, como jefe, es increíblemente valiosa para tus subordinados.

Y cuando, como jefe, te la pasas hablando con el malaventurado que no logra poner su vida en orden, y le das capacitaciones, y le pagas sus visitas al psicólogo, y le das días de descanso y le ayudas constantemente a él, mientras ignoras a los productivos (solo porque ellos no demandan tu atención), estás causando el mismo efecto: SENSACIÓN DE INJUSTICIA.

Asegúrate de ser justo, no solo con los salarios y bonificaciones, sino también con tu ATENCIÓN. Claro, puedes premiar a la gente en público para aprovechar también la atención de los demás… Pero asegúrate que TÚ le agradezcas personal y sinceramente a toda persona que lo merezca. Te apreciarán más, te respetarán, y tendrán más ganas de ayudarte a cumplir los objetivos por los que creaste la empresa en primer lugar.

Y, a fin de cuentas, todo jefe quiere eso, ¿no?