Cascos Blancos argentinos atienden a migrantes venezolanos en frontera

Los Cascos Blancos argentinos comenzaron a atender desde el miércoles a los migrantes venezolanos en el puente internacional Simón Bolívar, en el municipio de Villa del Rosario (Norte de Santander).

Ese mismo día, el personal del equipo humanitario del gobierno argentino, compuesto por médicos, psicólogos y enfermeras, tuvo que atender a un llamado de urgencia. Sobre el asfalto de esta estructura, que mide 315 metros de largo, una mujer venezolana se desplomó, debilitada por el hambre y la sed. 

Sin la reacción del grupo de galenos no hubiera sido atendida de forma inmediata, embarcada en una ambulancia y remitida por urgencias al hospital de Villa del Rosario.

La agencia de cooperación humanitaria hace parte de la cruzada internacional de atención al migrante venezolano, que atiende en el Centro Nacional de Atención en Frontera (Cenaf), ubicado a un costado de este corredor binacional.

La instalación de este puesto asistencial obedece a un trabajo de las autoridades colombianas de consolidar un campamento para brindar asistencia humanitaria a las 50.000 personas que se desplazan diariamente entre los dos países.

Durarán tres meses

Junto al complejo médico de los Cascos Blancos hay funcionarios de la Cruz Roja, de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), del Consejo Noruego para los Refugiados y del Alto Comisionados para los Refugiados de Naciones Unidas (Acnur).

“Adecuamos un puesto sanitario que tiene lo necesario para atender a madres embarazadas y menores de 17 años. En principio la misión está planificada para los próximos tres meses, pero esperamos estar acá hasta fin de año”, dijo Martín Torres, director de la misión médica.

En los primeros días se han atendido más de 80 pacientes, aunque el centro asistencial tiene una capacidad para atender a 200 personas al día.

A la llegada de este voluntariado se sumó también el desembolso de recursos por parte de la Unión Europea, que destinará 37 millones de euros (más de 120.000 millones de pesos) para enfrentar la migración venezolana en el territorio colombiano.

Estas labores humanitarias estarán centradas primero en Norte de Santander, pues según el Registro Administrativo de Migrantes Venezolanos (Ramv) en este departamento está concentrado el más alto porcentaje de migrantes, con 82.286 venezolanos en situación irregular (18,6 por ciento).

La cooperación ayuda a las alcaldías y gobernaciones de las poblaciones fronterizas a mejorar y desarrollar niveles de respuesta que hasta ahora son complejos para estas entidades territoriales

“Estos son anuncios muy positivos, pues Colombia sigue sumando aliados para la atención de la población venezolana. La cooperación ayuda a las alcaldías y gobernaciones de las poblaciones fronterizas a mejorar y desarrollar niveles de respuesta que hasta ahora son complejos para estas entidades territoriales”, concluyó Víctor Bautista, delegado para asuntos fronterizos de la Cancillería colombiana.