Presidente Santos entrega ayudas a colombianos deportados en Cúcuta

“No es admisible, bajo ninguna circunstancia, la forma en que estos colombianos han sido expulsados del territorio venezolano: dejando atrás hijos, muchos de ellos niños, como la hija de 12 años de una señora que me contó su historia, y que se quedó al otro lado de la frontera, mientras a su mamá la sacaban de donde había vivido por años”.

Así lo afirmó el Presidente Juan Manuel Santos luego de visitar en Cúcuta los albergues donde están alojados los colombianos deportados por Venezuela, y ver el avance de la atención por parte de las entidades del Gobierno Nacional.

“Les han destruido sus casas, sus pertenencias, sus documentos de identidad”, narró el Jefe de Estado, al reiterarles que llegaron a su casa, a su hogar y que recibirán el apoyo necesario.

“Pero quiero decirles, con toda la indignación que esto me produce, como colombiano y como el Mandatario de este país, a estos deportados, a todos los que han regresado, que en Colombia ustedes están en casa. No han regresado como forasteros, no son extraños en su tierra”, dijo el Presidente Santos.

Y les reiteró: “Aquí los recibimos con los corazones y los brazos abiertos”.

A estos colombianos que están llegando al país, les dijo que el Gobierno Nacional les va a brindar el apoyo necesario para que salgan adelante, se sientan en casa y rehagan sus vidas.

“Pueden tener la absoluta seguridad de que todo mi Gobierno, todos haremos y estamos haciendo lo que esté a nuestro alcance para que así se sientan, que se sientan en su patria, en su hogar”, indicó.

Dijo que varios ministros del gabinete han llegado a la ciudad para continuar el trabajo de acompañamiento y apoyo que se ha realizado desde el primer día de esta crisis.

“Nuestra prioridad ha sido y seguirá siendo ofrecer toda la atención humanitaria posible a quienes han perdido sus hogares”, agregó.

También reiteró: “Estamos manifestando nuestra protesta y exigiendo a las autoridades venezolanas respeto por la dignidad de los colombianos, respeto por estas familias que no son ningunos paramilitares, son familias pobres, familias humildes que lo único que quieren es que los dejen vivir, que los dejen trabajar”.

Les dijo que, como es su deber, los protegerá: “Yo, como Presidente de todos ustedes, tengo la obligación de protegerlos de todo tipo de abusos, y los voy a proteger. Entendemos su dolor, su indignación, su sentimiento de impotencia y humillación, y estamos haciendo todo para ayudarlos”.

Al concluir, el Jefe de Estado dijo: “Hoy no vine a hablar de Venezuela ni a Venezuela. Estoy aquí por los colombianos, y debo decir que alzar la voz y subirle el volumen a la confrontación no va a ayudar a resolver sus problemas. Vine a decirles a los cientos de colombianos deportados que acá está su país, su Presidente, su gobierno, para apoyarlos en todo lo que nos sea posible”.