Covid-19: 1.009 muertes en 88 días en el país

Su nombre era Arnold de Jesús Ricardo Iregui, tenía 58 años y era taxista. Su identidad marcó el dolor que provoca el coronavirus en Colombia al convertirse en la primera persona que falleció por la covid-19.

Desde su deceso, el 16 de marzo, hasta ayer, pasaron 78 días y, en ese lapso, la cifra de muertes ascendió a 1.009 según el reporte del Ministerio de Salud entregado ayer. La enfermedad fue detectada oficialmente en el país hace 88 días, el 6 de marzo.

Carlos Álvarez, infectólogo y asesor del presidente Iván Duque para el manejo de la pandemia, señala que, evidentemente, toda muerte es lamentable, “pero si lo planteamos desde la salud pública, los esfuerzos que se han hecho con medidas, como el confinamiento, han servido para que esa cifra no sea tan alta como si no se pusieran en marcha esas estrategias o no se hubiera hecho nada”.

Al revisar los datos se puede encontrar que la hipertensión, la diabetes y las enfermedades respiratorias son las patologías previas (comorbilidades) más comunes que tenían los pacientes.

Y al analizar cómo está el país frente a la región, se puede ver que se han dado 18 muertes por millón de habitantes, lo que lo deja bien parado frente a naciones como Ecuador (191), Perú (137), Bolivia (27) y México (77), y por encima de otras naciones como Argentina, con 12, o Uruguay con seis muertes por millón de habitantes.

Resultado de las estrategias

Además, Álvarez explica que era lo esperado, mientras que las medidas adoptadas sirvieron para ganarle tiempo al virus e ir ajustando las necesidades del sistema de salud, tanto en camas en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) como en la capacitación del personal médico.

Al respecto, Nathalia González Jaramillo, médica, máster en Epidemiología y candidata a PhD en la Universidad de Berna (Suiza), sostiene que a solo tres días de cumplirse tres meses con el coronavirus en Colombia, el país logró aplazar la curva de contagios con las medidas, como bien lo señaló Álvarez.

Sin embargo, dice González Jaramillo, “a pesar de que el crecimiento de la pandemia durante los primeros meses fue lento gracias a que el país estuvo en confinamiento total, la velocidad de confirmación de nuevos casos y muertes se ha acelerado en las últimas semanas”, como se pudo ver, por ejemplo, el domingo pasado cuando en solo un día se registraron 1.147 positivos y 49 muertes.

Por eso, la experta llama la atención sobre un aspecto crítico en el que está el país en este momento y tiene que ver con que América Latina se haya convertido en epicentro de la pandemia, como lo dijo la Organización Mundial de la Salud (OMS).

“Se estima que Colombia se dirige hacia el tanto temido pico de contagios. Un punto crítico para observar es que las restricciones de movilidad se han venido flexibilizando mientras los casos y muertes continúan en aumento”, señala la experta, al punto de mencionar que esta combinación suele producir un crecimiento acelerado de contagios y por lo tanto de muertes, algo que reconoció el presidente Iván Duque la semana pasada, cuando dio a conocer la apertura económica que empezó el lunes primero de junio.

Otras lecturas

Francisco Javier Díaz, virólogo de la Universidad de Antioquia, plantea que más que la cifra en sí, lo que preocupa es el aumento en el número de casos y muertes de la última semana; no obstante, deja claro que esto también tiene que ver con que el país ha aumentado el número de pruebas procesadas y, por ende, se conocen más casos. “Parece que hemos entrado en fase de crecimiento exponencial otra vez, luego de más de un mes de estabilidad. Esto es más claro en los datos de mortalidad”, agrega Díaz.

En este punto, de acuerdo con el infectólogo y epidemiólogo Carlos Agudelo, de la Clínica Universitaria Bolivariana, la gran mayoría de las muertes están relacionadas con las personas que la literatura científica había dicho que podían fallecer, es decir, las que tenían comorbilidades.

“Aunque mil muertes son muchas, también son muchas las que se pudieron salvar con las medidas aplicadas”, dice el experto. Además, detalla que los decesos hasta el momento están directamente asociados a los efectos del virus en los pacientes y no por la ausencia en la prestación de servicios médicos. “El sistema de salud no ha colapsado, como ha sucedido en otros países”, agrega Agudelo, haciendo referencia a casos como España, Italia o Estados Unidos, por ejemplo.

José Millán Oñate, presidente de la Asociación Colombiana de Infectología, por su parte, sostiene que la letalidad en Colombia no es tan alta si nos comparamos con otros países. “De hecho es baja, porque la mayoría de los casos tenían edad y comorbilidades como factores de riesgo”.

Además, agrega González Jaramillo, el hecho de que hasta ahora la mayoría de hospitales continúen con las camas disponibles para atender pacientes con coronavirus indica que las muertes ocurridas son en su mayoría no evitables.

“La comparación con España al tercer mes de pandemia, donde para esa fecha existían 240.000 contagios y más de 28.000 muertes, refuerza lo que tantas veces se ha enfatizado para nuestro país: el crecimiento de la infección ha sido lento y ha permitido planear estrategias y recursos”, dice la analista.

¿Y los retos?

Carlos Alberto Reina, epidemiólogo de la Secretaría de Salud de Cali y estudiante del doctorado en epidemiología de la Universidad de Antioquia, expresa que desde el punto de vista de cada ciudadano, el nuevo ciclo de medidas que empezó a regir en el país el lunes llegó con responsabilidades para cada persona. “A medida que avanza la epidemia, la disponibilidad hospitalaria va disminuyendo. No podemos permitir que la cantidad de casos de covid-19 sobrepase esta capacidad, pues eso sería desastroso”.

Una concepción similar tiene Agudelo, quien destaca que cada individuo deberá ser más responsable con el autocuidado.

“Debemos ser conscientes de la situación y del poder que tiene cada uno para evitar que el virus se siga extendiendo”, al reconocer que es inviable mantener una economía cerrada, porque otras personas “no están en la capacidad de mantenerse en sus hogares y las cifras de desempleo ya nos los mostraron”.

Por último y no menos importante, la tarea sigue siendo tener más disponibilidad de camas de UCI, como lo plantea el infectólogo Álvarez, al mencionar que los esfuerzos se concentran en 10 municipios, con el 80 % de los casos de coronavirus en la actualidad.

“Ese es un desafío que tenemos como país y como sistema de salud, ir a buscar a los contagiados”, porque en el resto del país, por ahora, “la epidemia se pudo contener”.